Un ciudadano mexicano fue aprehendido por las autoridades de la India en un vuelo entre Bangkok y Nueva Delhi porque, en su estupor etílico, había amenazado con traer una bomba. El avión tuvo que aterrizar en Calcuta, al hombre no le fue muy bien con las autoridades y ahora está muy cerca de pasar 10 años en una prisión allá.
Puras penas.