Si eres hispanoparlante y vives (o planeas vivir) en Finlandia, este libro es absolutamente imperdible. Escrito hace 110 años por el entonces cónsul de España en Helsinki cuando Finlandia era un Gran Ducado dependiente del zar de Rusia y la población de clase alta era mayoritariamente de habla sueca, este libro es un retrato veraz, ácido a veces y sumamente divertido en ocasiones sobre cómo vivían, comían, hablaban (o no), se relacionaban y morían los finlandeses de aquel entonces.
Aunque en algunas cosas el país ha cambiado sustancialmente, el carácter sigue siendo fundamentalmente el mismo.