I was definitely surprised by the way social media has been taken up by the Mexican mainstream given that we don’t have a great history of technology adoption ahead of the curve.
I mean, when local medical creams and condoms advertise their YouTube channels in their TV ads and even city bus lines promote their Twitter accounts you know it’s definitely been picked up by the public.
The Mexican economy recovered from the 2008-09 crisis, growing 5.5% in 2010 and 3.9% in 2011. People are shopping heavily during Christmas, there is a lot of infrastructure development, and even access to credit seems to be better. While the headlines are dominated by violence, poverty and the like, the economic climate to me feels much, much better than the one in Europe.
Update (26.3.2012): On macroeconomic terms, even the US Federal Reserve tends to agree: Mexico’s Economic Growth Strong, Offers Lessons for U.S. and Europe
During the life or a city, certain neighbourhoods will rise and some others will fall. It was with great sadness that I realised that the street where I grew up for 19 years has degentrified, which is a nice way of saying it’s gone to the boondocks. Most of the neighbours I knew have moved away, and the houses now have fencing they wouldn’t have required when I lived there. Sad as it was a great place.
If your business is international, and we want to make it local, we should know how to spell our local associates’ names correctly. It’s Rodrígues or Rodríguez, not Rodriques. FFS!
Radio México Internacional es la emisora de enfoque global del Instituto Mexicano de la Radio. Cada último viernes del mes tienen un maratón de lectura en el cual participé en septiembre.
Perdonen la mala calidad de los primeros 8 segundos del audio, no lo pude componer.
[audio:https://www.chivacongelado.com/wp-content/uploads/2011/10/RMIIMER.mp3]Acabo de terminar dos libros de futbol que me encantaron por razones totalmente diferentes.
Dios es Redondo de Juan Villoro es una colección exquisita de ensayos de futbol escritos por un autor bastante reconocido con una pasión por el deporte y un humor exquisitos. Un libro recomendadísimo para todos los que adoran el balompié con el corazón pero lo examinan con el cerebro. Algunas citas como muestra:
El juego sucede dos veces, en la cancha y en la mente del público.
Elegir un equipo es una forma de elegir cómo transcurren los domingos.
Es posible que el futbol represente la última frontera legítima de la intransigencia emocional; rebasarla significa traicionar la infancia, negar al niño que entendió que los héroes se visten de blanco o de azulgrana.
En sus peores momentos, el fan del futbol es un idiota con la boca abierta ante un sándwich y la cabeza llena de datos inservibles.
El sentido de la tragedia inventa insólitos recursos; sin embargo, a veces el futbol se parece a la canción ranchera y lo bueno consiste, precisamente, en salir ultrajado: “¡Qué manera de perder!”.
Un mexicano adicto al futbol es, entre otras cosas, un masoquista que colecciona agravios, jueves de dolor para los que no hay domingos de resurrección”.
La pelota reclama afecto. Si es pateada con pasión, el tiro acabará en las redes. Si es pateada con angustia o despecho, acabará junto a un vendedor de cervezas.
La tenés adentro de Juan Carlos Pasman contiene la crónica de la “era Maradona” al frente de la selección argentina desde el punto de vista de uno de sus mayores críticos en el periodismo deportivo rioplatense. El libro está muy mal editado y se nota que fue escrito a las carreras, pero pasando esos detalles por alto es interesantísimo. Para los que quieran saber más de cómo se manejan los intereses alrededor de la selección albiceleste es un libro imperdible. Quisiera saber cuándo habría un libro así sobre la selección mexicana en sus etapas La Volpe o Aguirre, pero para como se maneja el oligopolio televisivo probablemente nunca sucederá.
I hadn’t visited Paris since 2007, so it was quite nice to make a quick visit to France (more photos here). Had good meetings and was even able to meet a couple of friends.
A veces me da pena pensar que aunque me sé comunicar más o menos en ocho idiomas, todos son de origen europeo. Quisiera aprender aunque sea un poco de náhuatl o maya yucateco, pero probablemente tendrá que esperar a que me retire.